En un operativo conjunto con autoridades estadounidenses, Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán, fue arrestado en Texas junto a Ismael «El Mayo» Zambada. Según reportó The New York Times, Guzmán López colaboró durante tres años con las autoridades para lograr la captura del líder del Cártel de Sinaloa.
La negociación secreta y la captura
El acuerdo entre Guzmán López y las autoridades incluía persuadir a Zambada para que lo acompañara en un vuelo hacia el norte de México, bajo el pretexto de revisar bienes raíces. Sin embargo, el avión aterrizó en un aeropuerto privado cerca de El Paso, Texas, donde agentes federales ya estaban listos para efectuar la detención.
Antecedentes y colaboración
Los contactos entre Guzmán López y las autoridades estadounidenses se iniciaron tras la condena a cadena perpetua de su padre, «El Chapo», en julio de 2019. Durante la comparecencia en la corte de Texas, Zambada renunció a su derecho a fianza y se declaró inocente. Su abogado argumentó que Zambada no se presentó voluntariamente en Estados Unidos, sugiriendo que fue engañado para ser trasladado.
Cargos y consecuencias
Zambada enfrenta múltiples cargos, entre ellos lavado de dinero, homicidio y narcotráfico. Este arresto se considera uno de los golpes más significativos al crimen organizado en México en los últimos años. Expertos en seguridad advierten que la captura de Zambada podría desestabilizar el mercado criminal mexicano y aumentar la violencia en la región.
Impacto y futuro del crimen organizado en México
La detención de Zambada y Guzmán López marca un hito en la lucha contra el narcotráfico en México. Sin embargo, el vacío de poder generado por la ausencia de líderes clave puede desencadenar luchas internas y un incremento de la violencia. Las autoridades deben estar preparadas para enfrentar las posibles repercusiones de este arresto, tanto en el ámbito criminal como en la seguridad pública.
Datos y estadísticas relevantes
- Según datos de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA), el tráfico de drogas entre México y Estados Unidos genera ingresos anuales de aproximadamente 39 mil millones de dólares.
- Estudios del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señalan que la violencia relacionada con el narcotráfico ha causado más de 150,000 muertes en México desde 2006.
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