El Poder Judicial de la Federación (PJF) podría enfrentar una suspensión masiva de actividades el próximo 21 de agosto de 2024, dependiendo de los resultados de una crucial votación interna organizada por la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del PJF (JUFED). Este paro, de ser aprobado, representaría una medida sin precedentes en la historia reciente del sistema judicial mexicano, en protesta contra la reforma judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Votación clave entre jueces y magistrados
Juana Fuentes Velázquez, presidenta de la JUFED, informó que aproximadamente mil 600 jueces y magistrados federales participarán en esta votación, cuyo propósito es decidir si se procede con una suspensión temporal de las actividades judiciales. Según Fuentes Velázquez, el paro comenzaría en las primeras horas del 21 de agosto y se mantendría hasta que sus demandas sean atendidas.
A pesar de la posible interrupción de labores, la JUFED ha subrayado que no se descuidarán los derechos de los ciudadanos ni la Constitución. En un esfuerzo por minimizar el impacto de la huelga, se establecerá un calendario de guardias regulares para atender los asuntos más urgentes.
Reforma judicial: motivos de la protesta
La reforma judicial impulsada por el presidente López Obrador ha generado intensos debates en el país. Entre las modificaciones propuestas se encuentra la elección directa de ministros, magistrados y jueces por voto popular, la reestructuración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y la creación de nuevos órganos administrativos y disciplinarios que reemplazarían al actual Consejo de la Judicatura Federal.
La JUFED ha expresado su rechazo a estos cambios, criticando los foros de discusión sobre la reforma al considerarlos una «simulación» debido a la limitada participación de sus miembros en el proceso. La asociación sostiene que estas reformas podrían comprometer la independencia judicial y debilitar el Estado de derecho en México.
Impacto potencial del paro
Si la votación resulta favorable al paro, la suspensión afectaría a todos los órganos del PJF, incluyendo los Plenos Regionales, Tribunales Colegiados de Circuito y Auxiliares, Tribunales de Apelación, Centros de Justicia Penal Federal, Juzgados de Distrito y Auxiliares, el Centro Nacional de Justicia Especializado en Control de Investigación, Arraigo e Intervención de Comunicaciones, y los Tribunales Laborales Federales de Asuntos Individuales y Colectivos.
La posible paralización del sistema judicial genera preocupación en diversos sectores, pues podría retrasar procesos legales importantes y afectar la percepción pública sobre la estabilidad del sistema de justicia en México. Sin embargo, la JUFED insiste en que la acción es necesaria para proteger la integridad y la independencia del Poder Judicial frente a lo que consideran una amenaza sin precedentes.
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